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UN METRO PARA SEVILLA.

 El metro es un sistema de transporte que debe de ser rápido, cómodo, seguro y también económico. A estas cualidades que benefician a sus usuarios habría que añadir otra, tan importante o más que las anteriores, y es que, a diferencia de otro tipo de transporte de superficie, el metro, al circular bajo tierra en las zonas más congestionadas de las ciudades, libera y devuelve las calles y las plazas a los ciudadanos. Es decir colabora de manera decisiva, directa o indirectamente, a elevar la calidad de vida de toda la ciudadanía, sea o no usuaria del mismo.

 

Criterios Básicos de Diseño.

Se han tenido en cuenta, entre otros, los siguientes:

 

Permanente integración de la Ingeniería y la Arquitectura  buscando en todo momento conjugar la racionalidad técnica y la calidad estética, para armonizar lo operativo y lo funcional con lo bello.

 

Materializar formas sencillas y espacios claros, amplios, confortables y eficaces, capaces de proporcional comodidad a los cuerpos y satisfacción a los espíritus.

 

Transmitir en todo momento y lugar, claridad, seguridad y confianza a los usuarios.

 

Facilitar la accesibilidad de los usuarios a cualquier punto del sistema, de tal manera que esta se produzca con la mayor naturalidad.

 

Posibilitar una fácil limpieza y mantenimiento y una buena conservación de todo el conjunto.

 

Por último se ha pretendido homologar y unificar al máximo estos criterios de diseño, haciéndolos extensivos a todos los elementos del sistema: accesos, rampas, “mezanines”, escaleras, ascensores, vestíbulos,….. en todas las paradas, estaciones o intercambiadores, estén situadas en superficie o en caverna, para conseguir la fácil identificación de dichos elementos como partes de un todo.

 

Siguiendo los criterios básicos de diseño: sencillez, funcionalidad y estética se ha elegido una tipología de estación que permite resolver satisfactoriamente:

 

La Accesibilidad del Sistema, el Espacio de las Estaciones y el Tratamiento de los Accesos en Superficie.

 

 

SEVILLA: LA CIUDAD Y EL METRO

 Tras el nuevo resurgir del proyecto del Metro, la gran y magnífica diferencia de su moderna concepción, es la transformación radical de su estrategia global. Se propone ahora como una red, si bien concebida para la ciudad de Sevilla, que nace abierta y extendida por sus extremos a todo el territorio  urbanizado reconocido hoy como el escenario de ciudad metropolitana, que ha saltado fronteras geográficas y administrativas.

 

Y así los cuatro corredores básicos que componen la red del metro de Sevilla, cumplen funciones claras para el desarrollo ágil de la movilidad: las Líneas 1 y 2  se disponen como líneas transversales o de cruce del río y del valle. La Línea 3 transcurre paralela al río y la vertebra con un nuevo eje norte-sur. Estas tres líneas quedan abiertas a posible desarrollo futuro hacia el exterior. La Línea 4 adopta la traza de “circular interior” del casco urbano de Sevilla, para relacionar entre sí ejes de barrios periféricos.

 

Las extensiones previstas por “Plataformas Reservadas al Transporte Colectivo”, que en la actualidad se han desarrollado por la comarca del Aljarafe al oeste, y hacia Dos Hermanas al sur-este, marcan con precisión y claridad la nueva era en la concepción del Metro, que pasa de ser un transporte “puerta a puerta”,  a ser un “metro del territorio”, un factor clave en la construcción de la ciudad metropolitana, una red básica de líneas generales que integra a su través todos los diferentes medios, por ferrocarril, autobuses de largo recorrido, regionales, cercanías o municipales, taxis o itinerarios en bici y a pie..., con recorridos antes exclusivos del automóvil privado.

 

En definitiva un transporte colectivo de viajeros vertebrador e integrador de los existentes, sectoriales urbanos y suburbanos que permita la disminución del empleo del vehículo privado, introduciendo por ello un principio de racionalidad, de calidad y confort en los desplazamientos, corrigiendo la congestión actual de las redes y posibilitando el acceso ágil a los puntos neurálgicos de la nueva ciudad territorial.

 

El Metro, como nueva vía de la ciudad metropolitana debe ser extremadamente cuidadoso con el medio y contribuir a la construcción de un paisaje de altísima calidad, figurando con exquisitez formal y constructiva, un paso modélico sobre el espacio del valle, que es el lugar público más representativo a lo largo de  la historia por la condición fundacional de Sevilla como ciudad fluvial.

 

Del trazado cabe señalar que la condición más importante de la línea 1 es la constitución de un “paso territorial exclusivo del transporte público”, que cruza el valle, bajo la parte central del casco urbano  de Sevilla, mediante un túnel por cuyos extremos puedan ingresar los Tramos exteriores previstos o, en el futuro, otros alternativos que irradien ejes de crecimiento urbanos y metropolitanos.